Parecen pocos pero pueden ser muchos. En total, son 140 caracteres la medida de los mensajes en twitter, solo un puñado de pocas palabras. Sin embargo, son tantas las iniciativas que, aún siendo en algunos casos perjudicial para el buen uso del lenguaje la escasez de espacio, en otras ocasiones, ofrecen a la palabra el valor que tiene la capacidad de juntar letras con exquisitez.
Iniciativas como la de hastags de microcuentos se han convertido en una de mis rutinas y en uno de los factores más gratificantes en el momento de compartir momentos con extraños usuarios a los que te puede unir un rato de desinhibición, un puntual interés o una determinada coyuntura.
Para ellos, a mis seguidores de MICROCUENTOS aquí una recopilación de algunos de ellos:
MICROCUENTOS:
Iniciativas como la de hastags de microcuentos se han convertido en una de mis rutinas y en uno de los factores más gratificantes en el momento de compartir momentos con extraños usuarios a los que te puede unir un rato de desinhibición, un puntual interés o una determinada coyuntura.
Para ellos, a mis seguidores de MICROCUENTOS aquí una recopilación de algunos de ellos:
MICROCUENTOS:
Cerró y sintió
un pellizco. No habría más mañanas. Hoy los puntos suspensivos de otros
mensajes los cambió por un punto final.
Compartieron
casa y vida, sueños, ilusiones y amor, pero solo tras su ausencia, descubrió
que nunca logró disfrutar de él con él.
Lo repitió
hasta la saciedad pero se equivocó tantas veces q cuando quiso aprender, había
perdido el hábito de acertar en las dudas.
Quiso alzarse de
puntillas para alcanzar lo deseado y al levantar la mirada entendió que lo
lograría si se atrevía a intentarlo.
Lo fue todo
para él, le dio todo a él, sintió todo con y por él. O tal vez no. Cómo
descubrir dónde fue el amor. ¿Fue eso amor?
Envolvió de
amistad su lealtad tras serle infiel alguna vez, pero nada evitó que su corazón
fabricara amor y ternura a cada encuentro.
Lo intentó
tantas veces q nunca imaginó ni soñó, sólo trabajó para conseguirlo y fue en
aquel preciso instante cuando lo logró.
Y pasa
el tiempo y la herida sigue sangrando, la ausencia duele y el silencio
ensordece porque jamás la lluvia borra
"ayeres”.
Esperó su
llamada, confió en su palabra, creyó sus gestos, respetó sus silencios, sólo
cuando la vio marchar se sintió abandonado.
Siempre odió la
mentira, nunca engañó. Pero aquel día no sabía cómo podría soportar el dolor de
la verdad y mintió. Le mintió.
Tenía vértigo a
los números, su mayor valor era dotar de
sentido a la palabra eso q encontró cuando la silenciaron.
Sangraba la herida, dolía el silencio, el tiempo pasaba
pero el olvido no llegaba, seguía soñándolo y continuaba sintiéndolo.
Nunca le dijo
lo que sentía, jamás verbalizó sus emociones. Se le olvidó que algún mañana para
todo eso sería tarde...
Quiso visitar el pasado, miró fotos buscando recuerdos, esperando
sentir las mismas emociones pero solo encontró silencio.
Hace tiempo decidió marchar, intentó dialogar, guardó silencio y
sorprendentemente el adiós llegó cuando el viento parecía ya calmado.
Tenia al alcance su meta, conseguircar su sueño y PARO. Sintió que el
éxito fue la ilusión por hacer el sendero.
Miró alrededor y vio como su utopía se.convertía en un reto común.
Había soñado tanto e imaginado tantísimo que ahora sólo podía sentir.