Pocos preveían aquel
mes de junio de hace exactamente 10 años, cuando se inauguraba la Ciudad
Deportiva del LevanteUD en Buñol, que el futuro de la entidad podría ser tan
deleitoso como ha sido lo vivido el último lustro por la parroquia granota.
Sin embargo, a pesar de
que en esta sociedad actual solo la élite es lo que ofrece perspectiva de
existencia, el callado trabajo merece el reconocimiento de cuantos requieren
únicamente del triunfo de la felicidad del entorno.
Y esa dicha es
contemplar diariamente a centenares de niños y jóvenes vestir la camiseta
azulgrana del LevanteUD en los terrenos de juego de una escuela que esta
temporada futbolística lustra su página de vivencias con el reconocimiento de
la victoria. Ese triunfo que abre más en ilusión la esperanza en el trabajo
cotidiano de la factoría granota.
Una instalación nacida
bajo las críticas por su ubicación, a 40 km.de Valencia y a sólo unos metros de
una impresionante cementera con visos de contaminación ambiental pero una de
las iniciativas más elogiosas que sería injusto desvincular de sus únicos
verdaderos impulsores, Pedro Villarroel y Ángel Rubio.
Pero el balance nos lleva a mucho más. Lo que hace solo unos años era el sueño de conseguir la supervivencia del LevanteUD ahora es una realidad ilusionante, por mucho que se empeñen en envilecer medios de comunicación y personajes con ínfulas de estadista, el prestigio de la centenaria entidad granota.
El filial ha iniciado
este fin de semana la promoción de ascenso a la división de plata del fútbol
español. Sí, esa fase que durante años era el reto del primer equipo ahora, y que
hoy la disputa con una camada de futbolistas capaces de aspirar a lo que hace
solo unas temporadas era el gran objetivo de la entidad.
Pero la dicha de la
escuela granota se eleva más allá. Su equipo juvenil de división de honor
disputa los octavos de final de la Copa del Rey después de ser subcampeón de su
grupo en la liga.
Y ahí más. El equipo
juvenil B, por primera vez en su historia, ha conseguido el título de campeón
de la Liga Nacional. Y el Benjamín B ha sido campeón de su grupo como el Benjamín
C, el Alevín G, el Infantil C y el Infantil D también, además del Cadete D
Campeñon en 1ªRegional en el Grupo III por segundo año consecutivo.
En fútbol femenino, el
equipo más laureado de la Copa de la Reina junto al Espanyol de Barcelona, el
LevanteUD disputa las semifinales de la competición con una plantilla baluarte
también de la selección nacional.
La factoría
levantinista vive un presente para disfrutar y vislumbra un futuro repleto de
ensoñaciones. Quien late su corazón en granota y no es advenedizo al camino
triunfalista reciente, siente que esta coyuntura generacional levantinista es
el verdadero triunfo de esta centenaria entidad que debería celebrar estas
victorias tanto como la presencia en competición europea. Por eso, confío que
seguro el próximo 26 de junio cuando se conmemore el décimo aniversario de la
inauguración de la Ciudad Deportiva de Buñol el Levante UD celebrará una gran
fiesta.
Los chavales, nuestro
verdadero futuro de perviviencia granota lo merecen, porque ellos son los únicos
que escriben con letras de oro el porvenir del centenario LevanteUD.
