miércoles, 3 de octubre de 2012

DIA INTERNACIONAL DE LAS PERSONAS MAYORES


            Esta semana se ha celebrado el Día Internacional de las personas mayores. Este tipo de jornadas tienen un efecto muy relativo a pesar de la razón de concienciación social con la que nacen, sin embargo, a veces sería justo parar a atender emocionalmente el argumento de su creación.

              Referirse a las “personas mayores” parece sensiblería en una coyuntura donde sólo parece marcar tendencia la práctica, la imagen y la lozanía, lo nuevo y flamante.  Esas aspiraciones son precisamente las que están envileciendo a la sociedad, el respeto a quienes han construido esta realidad debería ser eterno y no caduco y descatalogado. Así se sienten las personas mayores en un mundo donde se “castiga” al enfermo, donde la inmediatez no entiende de emociones acunadas en recuerdos, donde el ayer no dispone de ningún valor respecto al mañana.

             Cuán equivocada vive la población si no es capaz de acunar los sentimientos de quienes disponen de la sapiencia que sólo entrega la experiencia. Pocos son los capaces de sentarse junto a los abuelos para escuchar atentamente sus vivencias, a veces envueltas de espíritu aventurero irreal pero siempre novelescas en exposición. Pocos son los audaces que quieren recoger el testimonio de luchas, aspiraciones y sueños de quienes germinaron nuestra propia vida. Pocos, muy pocos son los que quieren acompañar en la mirada atrás de quien vive más en pasado que en futuro….pocos somos valientes para parar un día de estrés profesional y emocional para acompañar a quienes mejor nos mesan los cabellos, a quienes con ojos vidriosos observan más que hablan,  a quienes prefieren vivir entre memoria temerosos de mirar en porvenir la proximidad de la parca.

              Personas mayores, ese apelativo que nadie quiere ostentar pero que todos deseamos adquirir porque será el resultado de haber dispuesto de una larga vida en experiencias, disfrutes e incluso disgustos.

               Personas mayores, el colectivo más generoso existente en esta mercantilista sociedad del siglo XXI , convivir con ellos es engrandecer el alma y alimentar de verdad y emoción el espíritu, factores indispensables para recuperar la pérdida de humanidad que parece devorarnos.

Seguidores