domingo, 14 de septiembre de 2014

ZONA DE CONFORT

      No solo se añora lo perdido, a veces se añora lo que creías tener o imaginabas poseer, una persona (o varias), un trabajo, un momento, una emoción.
 
    Vivir en el rincón de confort es ese estado al que casi todos aspiramos, a veces vivimos demasiado en él y en otras, de repente, te percatas que tal vez no era el estado más óptimo en el que vivir, pero la costumbre o la rutina  te lleva a creer que solo lo vivido es lo mejor, cuando la única verdad es que solo es óptimo porque representa lo conocido.
 
     Para aquellos que odiamos los cambios envolverse en la zona de acomodo es sinónimo de paz, de tranquilidad, es un estado controlado que a veces te permite aislarte en tu cueva, pero que en otras te asegura el éxito cuando sales a pavonearte. Y ese éxito solo es la búsqueda de esa paz interior que a veces puede alcanzar cuotas de eso tan difícil de sentir. la felicidad,
 
     Sin embargo, en ocasiones ese estado de confort es ficticio, es la trampa que la rutina te ofrece para saciar esa necesidad de cambio que, de vez en cuando, y en según que parcelas, todos necesitamos...alguna vez.

miércoles, 10 de septiembre de 2014

HOMENAJE AL UNIVERSO FUTBOLÍSTICO


     Nació con el fin de entretener y a lo largo de la historia ha sido bautizado como “el opio del pueblo”. Aquellos que satirizan un deporte que a la par es un juego y que en este mundo globalizado se ha convertido, junto con solo un reducido grupo de actividades, en uno de los universos mercantilistas más potentes del planeta, no entenderán que, a pesar de todo y, sin embargo, el fútbol no puede librarse de aquello que lo determinó en su raíz y caracteriza cada día su expansión y crecimiento: la pasión, la euforia, el encanto, en definitiva, el sentimiento.

     Que es un negocio para unos pocos y un mercado para muchos es algo tan obvio que no obstante, no reduce ni un ápice de emoción para el aficionado (hombre y mujer).  
 
     No contrariaré a quien considera que se trata de una droga social que representa perfectamente el “al pueblo pan y toros” de regímenes dictatoriales, no discutiré que en ocasiones, el fútbol ha sido una herramienta con la que hipnotizar a sociedades, pero personalmente no puedo evitar rendir pleitesía a un deporte, un juego, una actividad o un mercado, que consigue el abrazo ante el compañero de asiento en un estadio del que no sabes el nombre y solo te une el placer que durante un pequeño instante, provoca un gol.

     Esa religión del siglo XXI a la que se han rendido genios, intelectuales, sociedades, y pueblo llano por igual, sigue singularizando lo que convierte al hombre en animal sensible: la capacidad para emocionarse.

lunes, 1 de septiembre de 2014

EL SILENCIO DE LA PALABRA

    Siempre queda tanto por decir.  Hay palabras sanadoras, palabras que hieren, palabras sabias, palabras gritadas, palabras escritas y palabras que se lleva el viento.
   Los gestos hablan, las palabras engañan.
   Los gestos son perdonados, las palabras te condenan.
   Por qué un abrazo tiene más valor que un te quiero, por qué una mirada es más real que un adoro… Por qué callamos las palabras.
   Hoy escribimos pero no hablamos. Nos comunicamos por twitter, Facebook, washap, email…utilizamos palabras, pero ¿nos expresamos? O mejor ¿expresamos lo que sentimos?
   Miedo a las palabras. Siempre perversas, rebeldes, engañadoras, livianas y siempre derrotadas ante un silencio, una caricia...de nuevo un gesto.
    ¿Y el poder de la palabra?, por qué es mejor imaginar que decir, por qué mejor mostrar que contar, por qué no hablamos lo que sentimos, por qué ocultamos las palabras….
   Sin embargo, a veces, el único cobijo es la palabra.

   Y entonces puede aliviar y puede matar, puede engañar y puede seducir, puede calmar ausencias o provocar desazón, generar anhelos o abrir senderos….solo la palabra puede crear y destruir.

 
   Pero nunca las palabras mienten, solo nosotros las hacemos falsas.

Seguidores